Por Julieta Izcurdia

Desde mediados de los noventa, más de 50 países se han comprometido en algún tipo de iniciativas de presupuestos con perspectiva de género. En estos avances, el rol de la sociedad civil fue fundamental para examinar cómo los presupuestos pueden eliminar las brechas de género, promover la igualdad y revertir la discriminación en el acceso a derechos.

En este trabajo, para proporcionar herramientas accesibles y prácticas que permitan comprender el presupuesto y faciliten la incidencia y el activismo para impulsar acciones hacia un gasto público más justo y equitativo, la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia en Argentina publicó “Análisis presupuestario con perspectiva de género. Manual para activistas y organizaciones de la sociedad civil”.

La guía ofrece herramientas para analizar el presupuesto partiendo de una problemática o violación a los derechos de las mujeres y cuenta con una sección teórica y otra práctica. En la primera se explica el ciclo presupuestario, la identificación de la información que proporcionan los documentos más relevantes de cada etapa y las oportunidades de incidencia. En la sección práctica se propone la aplicación de una metodología que, partiendo de 

Para hacer más accesible su uso, el manual cuenta con ejemplos, videos tutoriales, y está disponible online con todos los enlaces necesarios para acceder a la información relevante para el análisis. Si bien los ejemplos se enfocan en el presupuesto nacional, la metodología propuesta es perfectamente replicable para el estudio de los recursos de otros niveles de gobierno u otros sistemas presupuestarios homologables.

Elaboramos esta guía porque creemos que el análisis presupuestario es una herramienta muy valiosa para el activismo, que ha dado buenos resultados cuando la utilizamos en coalición en defensa de los derechos de las mujeres y de los grupos más desaventajados de la sociedad. Activistas de diferentes disciplinas podemos analizar el presupuesto y hacer incidencia con ese análisis. Por ejemplo, el activismo llevado adelante durante 2018 junto a un grupo de organizaciones de mujeres, condujo a que el Congreso aumente las asignaciones inicialmente proyectadas por el Poder Ejecutivo Nacional en la Ley de Presupuesto 2019 para el Instituto Nacional de las Mujeres, que tenían una proyección muy por debajo de la asignación aprobada para 2018.

Los esfuerzos por analizar los presupuestos públicos desde una perspectiva de género forman parte de iniciativas más generales que buscan integrar un enfoque de derechos humanos a los presupuestos y mostrar cómo el gasto público y la recaudación están directamente conectados con la garantía de los derechos. Por supuesto que los presupuestos también deben tener en cuenta otras variables, que además tienen interseccionalidades con el género, como la raza, la etnia, la orientación sexual, la condición socioeconómica, la discapacidad, la edad, etc.

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Los Estados han recibido múltiples recomendaciones sobre la necesidad de implementar presupuestos sensibles al género, garantizar que las mujeres tengan igual voz en definir cómo se gastan los fondos públicos, y llevar a cabo evaluaciones de impacto de género tanto de la legislación como de la política pública presupuestaria. Tanto las leyes como las políticas y las prácticas fiscales deben estar orientadas a poner fin a la discriminación estructural en lugar de consolidar las desigualdades de género, étnicas, etarias, o económicas.

Esperamos que este manual sirva para que más organizaciones y activistas se sumen a analizar el presupuesto con enfoque de derechos, y seamos cada vez más quienes trabajemos en la promoción de un gasto público más justo y equitativo, para que más países se comprometan realmente con políticas que garanticen la igualdad.

Julieta Izcurdia es abogada del área de Derechos Económicos, Sociales y Culturales en Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) en Argentina